Ni en sueños

"En el Ministerio de Educación, Astori volvió a atacar a los blancos: "La oposición no hubiera hecho la reforma de la salud. No hubiera apoyado la educación ni puesto en práctica el plan de asignaciones familiares ni el plan Ceibal. Ellos priorizan el volumen del gasto y no prestan atención a las necesidades sociales del país. Nuestro gobierno equilibró las cuentas y realizó el gasto social"."
En eso estamos de acuerdo.
Ni en sueños, un gobierno formado por personas realmente demócratas, pertenecientes a partidos fundadores probadamente defensores de las leyes y la Constitución, jamás habrían pergeñado ese mamarracho, que solo pudo ser parido por mentalidades dictatoriales y por cierto bastante fuera de tiempo.
Tampoco hubiera aumentado los recursos a la educación, a cambio de NADA, manteniendo y aumentando el corporatividmo sindical, la demagogia, la violación contínua y permanente de la laicidad, etc.
Las asignaciones familiares siempre existieron y hubieran sido mejoradas, sin duda, y como siempre fue, exigiendo a cambio muchas cosas a los beneficiarios.
En cuanto al Plan Ceibal, es patético que este mequetrefe siga poniéndose el poncho del Plan, cuando esto fue concebido, financido y apoyado por una organización internacional, y para lo cual, este gobierno no tuvo mas participación que decir SI.
Cualquier otro gobierno hubiera hecho lo mismo, o mejor. Por lo menos estaría combatiendo la aparición de computadores del Plan en venta en las ferias.
Es verdad que la oposición prioriza el volumen del gasto, porque por experiencia se sabe que el gasto, especialmente el gasto histérico y demagógico, solo conduce a desastres, como el que se nos viene, gracias a él y su política "social", que para variar, terminará afectando a los mas necesitados, a través de la inflación.
Las necesidades sociales se combaten eficientemente gastando lo menos posible, para que haya la menor cantidad de impuestos posible, y la sociedad genere a través de la empresa libre, el empleo, única forma de distribuir correctamente la riqueza y no la miseria.
Y para finalizar, el gobierno no equilibró las cuentas ni mucho menos. Y pronto lo vamos a comprobar. El déficit crece sin parar, porque él y sus secuaces, gastaron de la peor forma posible, en gasto corriente, que es el que no se puede achicar cuando las papas queman.
Lonjazo