Patetico

"Me parece patética la información que se trasmite desde la Embajada de Estados Unidos sobre Uruguay. Se me ha acusado de cosas que yo no hice: yo no decidí ni participé en la muerte de Dan Mitrione", afirmó el Dr. Henry Engler a El País. E

ngler se manifestó indignado y acusó a la embajada de "manejar informacion falsa", publicada en la época de la dictadura, y de la cual "se extraen falsas conclusiones", dijo. "Todo es patético, es una grosería y un ataque". S

egún afirma Engler, médico graduado en Suecia y especialista en la búsqueda de tratamiento para el mal de Alzheimer, "se me acusa de cosas que yo no hice: yo no decidí la muerte ni el secuestro (de Mitrione); la decidió la direccion del MLT, de la que yo no formaba parte. Yo jamás lo vi a Mitrione". E

ngler sostuvo que "a mí y a otros nos acusaron de muchas cosas mientras estábamos en cautiverio durante la dictadura y no nos podíamos defender. Aun hoy se me acusa, pero ¿quién es el que acusa? ¿En qué se basan las acusaciones?".

No es difícil comprender la indignación del Dr. Engler!

Que a uno le carguen delitos gravísimos que no cometió, debe ser espantoso y angustiante!

Que esto se haga, porque uno formó parte de un movimiento que usó la violencia, lo hace mas fácil de creer para el resto de la sociedad!

El Dr. Engler, formó parte del MLN y fue una altísima figura en sus jerarquías.

En esas circunstancias, ordenó secuestros, rapiñas, asesinatos, torturas, o directamente las cometió él mismo.

Y por eso fue detenido, procesado, preso y amnistiado.

Hoy, a tres décadas de esos hechos terribles, vuelven sobre su persona, fantasmas del pasado, que podrán ser verdaderos o falsos, pero son verosímiles!

El hombre se indigna, porque según él, le están colgando cosas que no hizo, o que no pueden ser probadas.

Acude a nuestra Constitución y a los viejos principios básicos del derecho penal liberal!

Ahora sabe como se estarán sintiendo otros, que están procesados con prisión también por cosas que no hicieron, o en todo caso, no pueden ser probadas.

A otros les aplicaron un principio fascista que dice “dado el lugar que ocupaban no puede no saber lo que estaba pasando”!

Y con eso marcharon presos.

Nunca creí que tan pronto, esos principios fascistas fueran a caer sobre quienes los propiciaron y aplaudieron!

Muchos deberían ir poniendo las barbas en remojo, porque se desataron demonios y ahora no es fácil volver a meterlos en el infierno, y están convirtiendo en un infierno a nuestro querido país.

Lonjazo.