Así son, unos y otros

En estos días, con la presencia del Papa, se organiza en Madrid, una reunión multitudinaria de creyentes jóvenes de todo el mundo.

Llegan decenas de miles de fieles, convocados por su amor a la iglesia, a oir a su líder espiritual, y pasar unos días de confraternidad cristiana.

Nadie los obliga, ni les impone reglas.

Simplemente acuden a un llamado espiritual, por su propia voluntad, a besar el anillo papal.

Son gente de fe, personas de bien, de buena voluntad, que no le hacen daño a nadie!

Representan al bien, al ser humano bueno y noble dispuesto a dar, mas que a recibir.

Obviamente, el mal no tolera semejantes demostraciones y reacciona.

El comunismo y sus secuaces disfrazados, organizan un encuentro violento contra esos miles de jóvenes católicos, que se reúnen para orar y confraternizar en paz.

Pocas veces se ha visto tan crudamente la lucha entre el bien y el mal, entre la paz y la violencia, entre el amor y el odio.

A la vista está quienes están de que lado!

Por una parte, jóvenes que anteponen con alegría la fe, la esperanza y la caridad, y por otra, jóvenes también, pero que están ganados por la envidia, la violencia y la corrupción, que exigen todo pero no están dispuestos a dan nada.

Eso es lo que logra el comunismo en la juventud.

Lonjazo