Bravo...

El último dictamen del Tribunal de Cuentas de la República, da cuenta de la situación financiera de la Intendencia Municipal de Montevideo. Era hora, realmente se demoró el expediente.
Si hacemos un poco de historia reciente, se recordará que cuando el Dr. Vazquez accedió a la primera magistratura municipal de Montevideo, recibió un superavit fiscal de 18 millones de dólares, que su antecesor, el Ec. Iglesias, se esforzó tanto en acumular.
Dichos fondos, fueron rápidamente despilfarrados en el recordado subsidio del boleto, por parte del Sr. Rossi, estudiante de arquitectura y sindicalista, que hacía sus primeros pininos como gobernante, junto a su escurridizo jefe.
El día que el Dr. Vazquez dejaba el cargo, junto con el Cr. Alvarez, declararon públicamente que las finanzas estaban equilibradas, cosa que no podía confirmarse, porque el Secretario de la Junta, el Cr. Nuñez había traspapelado el informe del Tribunal de Cuentas, que mágicamente apareció después de las elecciones y que ya mostraba un déficit de mas de 20 millones de dólares.
Por el sacrificio, el Cr. Nuñez llegó al senado y el Cr. Alvarez nada menos que al Tribunal de Cuentas del que se burló. Todos conspicuos miembros del Partido Socialista que hoy festeja sus jóvenes 95 añitos.
La mentira, que tiene siempre patas cortas, se supo cuando ya era tarde, aunque de todos modos, de poco hubiera servido, porque la población de Montevideo no valora mal esa conducta, al contrario la premia.
Una vez en el poder el Arq. Arana, el desquicio, el amiguismo, el acomodismo, el despilfarro, los viajes, siguieron aumentando el déficit año tras año. Como muestra baste decir que de 11 cargos de confianza, los progres pasaron a 107, y para financiarlo infructuosamente, dicho sea de paso, pasaron de un presupuesto de 85 a uno de 360 millones de dólares.
Pero la población de Montevideo, no conforme con lo vivido, volvió a colocar al Arq. Arana en el mismo cargo, quien asombrosamente, al volver bajo los insultos del sindicato, declaró públicamente que no sabía que el déficit fuera tan alto, como si el anterior intendente hubiera sido el dios verde.
El tiempo siguió su curso, llegó nuevamente a su fin esa etapa y seguimos sin saber a cuanto llegaba el famoso déficit.
Pues bien, hoy, que el Arq. Arana es Ministro, el Dr. Vazquez Presidente, el Cr. Alvarez Ministro del Tribunal de Cuentas, el Cr. Nuñez senador, el déficit municipal de Montevideo, asciende a unos modestos 200 millones de dólares.
Claro que esto no es una queja ni un reproche, porque gracias a eso, hoy vivimos en una ciudad y un departamento en el cual no hay un solo asentamiento, ni un solo basural, ni un solo pobre en la calle, ni un solo pozo en el pavimento que parece un billar, y además disfrutamos de un saneamiento que es la envidia del continente y unos casinos que dejan grandes ganancias.
Gracias Arana, con que haga una gestión ministerial solo parecida, el Uruguay llega al primer mundo en un par de años.
Lonjazo.