Cambalache, e ainda mais...

Uno de los artículos del proyecto a estudio del Senado, relativo a la “salud reproductiva”, dice que la mujer puede “decidir la interrupción de su embarazo durante las primeras 12 semanas de gravidez”. “Bastará que la mujer alegue ante el médico circunstancias derivadas de las condiciones en que ha sobrevivido la concepción, situaciones de penuria económica, sociales, familiares o etarias que a su criterio le impidan continuar con el embarazo en curso”, dice el artículo.
“Luego de las 12 semanas de gestación sólo estarán habilitadas para realizarse un aborto en aquellos casos que esté en riesgo la vida de la mujer o en los que existan malformaciones congénitas que impliquen riesgo para el feto.”
Es simple y coherente, como todas las cosas de los comunistas. Por este articulo, de ser aprobado, la mujer puede decidir matar a su hijo, durante las primeras 12 semanas, y no tendrá castigo. Bastará para eso alegar lo que se le antoje.
Ahora, si lo mata en el primer minuto de la semana 13, en caso de que eso pudiera probarse, seria procesada por aborto.
Eso si, si lo mata un minuto después de nacido, la procesan por homicidio muy especialmente agravado. La única diferencia habrá sido que respiró, por lo menos una vez. Quizás, después de tanto delirio, habrá que promover la despenalización del filicidio, siempre que concurran las mismas razones.
Con ello, se cumpliría uno de los anhelos de los promotores, cual es, que no se vean tantos niños en las calles mendicando. De locos no?
En el resto del articulado, que si recibió apoyo, se reconoce el derecho de las personas “a procurar su satisfacción sexual durante todo su ciclo vital según sus propias necesidades y preferencias siempre que resulten respetados los derechos de terceros involucrados”.
También la capacitación de los docentes de los ciclos primario, secundario y terciario “para la promoción del ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos como parte de una ciudadanía plena.”
Clarito como agua de manantial.
Quieren aprobar todo el paquete de una sola vez.
Aborto libre, reconocimiento legal de la homosexualidad como normal, y promoción del despropósito a nivel de la educación.
Un soberbio mazazo sobre los derechos de la familia y sobre la moral occidental judeo-cristiana.
“Stella Cerrutti, coordinadora de la Comisión de Educación Sexual (CES), en diálogo con Ultimas Noticias señaló que en materia de sexualidad se tratarán todos los temas que les interese a los niños y jóvenes, comenzando por el conocimiento de su propio cuerpo, la masturbación, las relaciones sexuales, las orientaciones sexuales, y allí se tratará la homosexualidad, bisexualidad como cualquier otro tema y también el aborto. "La homosexualidad será un tema más en el aula, porque educar no es transmitir valores, sino generar información lo más objetiva y científica posible que posibilite una reflexión crítica que aporte a su propia concepción moral, en un marco ético-social de tolerancia y respecto a la dignidad humana", explicó.”
“Educar no es trasmitir valores…!” Por DIOS.
Como un educador puede decir semejante cosa? En estas manos están los niños de este país?
Los marxistas ateos que desgobiernan todo, se van a encargar de deformar la mente de los niños, sin importarles lo que sus familias opinen!
Así de simple. Es el desconocimiento inicial y final de la célula básica de la sociedad.
Esta señora, está “coordinando” como meterles a los niños en la cabeza, que es lo mismo que sea cura, colchonero, rey de bastos, caradura o polizón.
Que la homosexualidad y la bisexualidad son tan normales como la heterosexualidad y que el aborto no es un asesinato, sino otra opción mas.
Según esta buena señora, educar “no es trasmitir valores”, sino generar información “objetiva”, (habría que ver que es objetivo para ella), que posibilite la reflexión de los niños. Seguramente cree que inyectar en la mente de los niños sus convicciones, es algo ético y que respeta su dignidad humana. Vaya forma de respetar la dignidad humana de esos niños y de respetar los derechos inalienables de sus padres.
Por DIOS!!!
Los hoy homosexuales y bisexuales, cuando fueron niños no se les dijo todo eso en la escuela y sin embargo, hoy pueden ejercer libremente su “vida”, por decirlo de alguna forma.
La Constitución los protege y está bien que así sea, porque no es cuestión de discriminar. Pero de ahí a igualar… hay un trecho.
El género humano es binario, XX y XY.
No hay en la naturaleza otra opción. Se es varón o se es mujer, a imagen y semejanza del creador.
Cualquier intento de subvertir eso, es antinatural y antihumano.
Pero hacerlo con criaturas inocentes, pasa a categoría criminal.
La educación básica, en lo ético y lo moral corresponde inalienablemente a la familia. No puede el estado a través de sus órganos, arrogarse tal derecho.
Para la gran mayoría de las familias la homosexualidad y la bisexualidad no son normales ni cuestión de opción sino de degeneración. Y tienen derecho a pensarlo y así trasmitírselo a sus hijos. Por lo tanto, no tienen derecho las autoridades, a cambiar eso en la escuela.
De prosperar esta desatino, y de permitirlo el presidente, estará logrando entrar en la historia, como quiere, pero no por la puerta correcta.
Tarde o temprano caerá sobre él la responsabilidad.
Es el Uruguay que avanza, y se olvida de las palabras del Papa Juan Pablo II, cuando dijo “el mal nunca puede ser camino hacia el bien”.
En el día de la Constitución, recordemos los artículos 40 y 41 de la Constitución dicen: La familia es la base de nuestra sociedad. El cuidado y educación de los hijos para que éstos alcancen su plena capacidad corporal, intelectual y social, es un deber y un derecho de los padres.
Esto quiere decir que no puede venir el estado, y a través de esta buena señora, a enseñarle a nuestros hijos lo que a ella se le antoja.
La formación moral de nuestros hijos es nuestro deber y nuestro derecho indelegables.

Lonjazo.