Uno en el clavo...

Uno en el clavo y otro en la herradura.
Un día parece que se despertó a la realidad, que empezó a ver las cosas claras, pero al otro día, sale con Marx.
El ministro Mujica no nos da tregua.
”los campesinos pueden tornarse parte del desarrollo del desenvolvimiento socialista, pero con una condición: que las sociedades que han vivido tanto tiempo a costa de los campesinos, comiencen a devolverles por un tiempo aquello que le tomaron… “
El viejo Marx, veía a la sociedad luchando, buenos contra malos, explotados contra explotadores, y sobre esa base teórica, falsa de toda falsedad, contribuyó a edificar el mayor, mas fracasado y mas dañino andamiaje ideológico de toda la historia, sobre el cual se construyó la peor monstruosidad política que la humanidad recuerde.
Sobre esa macabra y maléfica base, se edificaron las peores, mas arteras y asesinas dictaduras de toda la historia humana, algunas de las cuales, todavía hoy, siguen asesinando y oprimiendo.
No pudo verlo en la práctica, y seguramente de haberlo visto, hubiera reconocido el error, porque se trataba de un intelectual honesto, tanto como monstruosos fueron sus aplicadores.
De haber sido cierto, Lenin, Stalin, Mao, Castro, por nombrar solo a los peores, hubieran tenido éxito en su salvaje intento de solucionar el problema humano, pero no pudieron, fracasaron. Y fracasaron por una sencilla razón, su lectura de la realidad humana fue errónea, y eso los llevó generar razonamientos perfectos, sobre premisas erróneas, lo cual los condujo indefectiblemente a conclusiones erróneas.
Así, décadas de salvajismo insano, solo condujeron a un patético derrumbe, bajo el peso de su propia falsedad.
Le erraron a la naturaleza humana, nada mas ni nada menos. Y peor todavía, lo tomaron como dogma de fe, descartando siquiera conocer, cualquier otra teoría que la contradijera.
Hoy, ya corriendo el siglo XXI, con toda la historia a la mano para poder evaluar la realidad, el pobre viejo terrorista, sigue intentando ver la realidad, a través del único lente que conoce, el Marxismo.
No puede reparar que es una gigantesca patraña fracasada, por la sencilla razón que no conoce otra, por lo tanto, solo le queda pensar que fue un problema de aplicación, y que vale la pena volver a intentarlo.
Sabe si, que existe una corriente llamada liberalismo, que han intentado deformar con el prefijo neo, pero nunca se tomó el trabajo de estudiar, y menos de reparar que los que la aplicaron, viven mucho mejor, desde todo punto de vista y los que empezaron a aplicarla, después de aventuras marxistas, mejoran día a día.
Tantos años preso, podría haber aprovechado para leer alguna otra cosa, lo que hoy le permitiría hacer una lectura mas acertada de la realidad, pero, seguramente los pasó mascullando odio y reforzando su escasa lectura, con otros autores de la pléyade delirante del siglo XX.
A ese pobre hombre, sin muchas luces, cascoteado por la edad y la violencia de la vida que eligió, los orientales lo votamos y lo pusimos en un Ministerio de producción, que no entiende, no conoce, y ni siquiera es capaz de valorar el daño que, con su ignorancia supina, le puede ocasionar al país y al pueblo que dice amar tanto.
Que mal hicimos para merecer esto!
Lonjazo.