Tenían razón...

En la contratapa de Búsqueda de la primer semana de febrero, se publica un excelente y extenso reportaje al Ministro Mujica.
En el mismo, el pintoresco personaje, sin perder para nada su natural ordinariez, que cada vez mas, en vez de simpatía empieza a dar lástima, desliza su visión actual sobre muchos temas, que vamos a transcribir y comentar, no porque se tenga una visión contraria a lo que expone, todo lo contrario, sino porque sus dichos, constituyen la peor y mas repugnante voltereta de payaso que jamás se vio en el Uruguay, por lo menos, con tanto descaro. Y conste que se han visto muchas.
Porque si tuviera un mínimo de hombría de bien y vergüenza, rubricaría el reportaje con un rotundo, “tenían razón los gobiernos anteriores, especialmente los de Lacalle y Batlle, a los que les hicimos la vida imposible, sin que nos importara que por ello, sufriera todo el país”.
“La libertad de comercio, que significa la mejor explotación de las ventajas comparativas, hay que separarla de lo político y de lo ideológico, o de lo que me gusta y no me gusta. Vender bien es parte de trabajar bien”.
Que ahora venga a reconocer las bondades de la libertad de comercio, que es igual a neoliberalismo, es tragicómico, por lo menos.
“No puedo confundir la realidad con la ideología y no acepto caminar en la realidad sin ideología pero nunca podré contribuir a una sociedad mejor si no multiplico la riqueza de mi país”.
“El cuento de agrandar la torta no lo aceptamos mas”, era lo que se contestaba con sorna, cuando esto mismo lo decían los gobiernos anteriores.
“No debo atar lo político con lo comercial. Lo político tiene que ver más con las ideas, con los sentimientos, y lo comercial tiene que ver con las ventajas comparativas comerciales.”
Bienvenido si es uno de los tan mentados cambios que nos prometían… pero los únicos que ataron lo político a todo, siempre, fueron ellos, con él a la cabeza.
“En Venezuela hay unos discursos y unos abrazos bárbaros, pero en la calle las manzanas y los vinos son chilenos. Nosotros hacemos los discursos y ellos hacen los negocios”.
“Ahora, cuanto mas me diversifique mejor, inclusive con Estados Unidos”.
Teléfono para Gargano, Zabalza, Chifflet, Lorier, Arismendi, etc…
“Me resulta admirable Nueva Zelanda, lo tomo como modelo comercial. Le vende a 117 países juega en toda la cancha y tiene como 6.000 vendedores que andan con la valijita por todo el mundo; son una pesadilla. Y es un país de cinco millones de habitantes”.
Llegó tarde el Ministro. El Dr. Batlle, la tomó como modelo mucho antes. Era un visionario…
“Soy un administrador de los recursos del pueblo uruguayo y no se puede seguir invirtiendo en Bella Unión si no se mejora sustancialmente la productividad de la caña. Es duro hablar así, pero a Uruguay se le acabó el tiempo de la poesía”.
Mas duro debe ser, tener que reconocer, como lo hace detrás de este palabrerío, que toda la vida fue un gil o un taimado mentiroso.
Y duro también para los que lo votaron, creyendo que se trataba de alguien que tenía la fórmula mágica de solución a todos los problemas, cuando era todo lo contrario a ojos vista. Parece que la esperanza en la dolce vita sin esfuerzo, también tiene cara de hereje.
La productividad de la caña no va a mejorar como para acercarse a los precios brasileros y la poesía se va a ir al tacho de la peor forma, con sus famosos peludos y con nuestra plata.
Todavía no acepta totalmente la realidad… pero va en camino.
“Cuando me dicen que están plantando boniatos en enero en una tierra ocupada, entonces digo: están locos: La reforma agraria la hacen los que hablan poco y laburan la tierra, pero la gritan los urbanos que no van ni en la puta vida a trabajar la tierra”.
En cual de ambos grupos se incluirá él?
Cual será la locura, ocupar la tierra o plantar boniatos en verano en tierra ajena?
“Nunca podré contribuir a una sociedad mejor si no multiplico la riqueza de mi país, porque el pueblo uruguayo me enseñó que no se puede repartir la miseria.”
No. No se puede. Nunca se pudo. Pero en nuestro querido país hubo gente, entre los cuales él se encontraba, que durante años se empeñó en que se repartiera la miseria, y cuando se les decía que eso era imposible, venían las acusaciones de insensibilidad, de maldad, de neoliberalista, hasta de corrupción y demás epítetos y técnicas fascistas excelentemente bien usadas.
Decir hoy esto es digno de un couplé de La Reina de La Teja…
Lo mas triste de todo esto, es que este “mea culpa” del impresentable Ministro, nada dice sobre el tiempo que él y sus secuaces nos hicieron perder, tiempo que otros ganaron, como Chile por ejemplo y hoy disfrutan con total merecimiento.
Nada dice de los miles y miles de orientales que pagaron con desocupación y miseria, estos caprichos demagógicos de la izquierda.
Nada dice de los muertos que su delirio, del que no reniega, dejaron de recuerdo.
Ignoraba antes de llegar al gobierno que la realidad era esta?
Si es así, estaba incapacitado para cualquier cargo y lo sigue estando, es un gran irresponsable.
Pero si no lo ignoraba, entonces estamos ante un fascista descarado, mas incapacitado todavía, si eso es posible. Como creerle hoy cualquier cosa que diga?
Es buena cosa que hoy esté reconociendo la realidad y avisando que va a gobernar en función de eso, pero bueno sería que además, pidiera perdón por todo lo que nos hizo. Pero no puedo guardar tanta esperanza. Sujetos como este, inspiraron a Discépolo cuando escribió: “Que falta de respeto, que atropello a la razón,… da lo mismo que sea cura, colchonero, rey de bastos, caradura o polizón.”
Lonjazo.