Repercusiones
Apostaría que jamás nadie imaginó que tan pronto se
iba a ver tan claro, el verdadero sentir dictatorial y prepotente de la
izquierda o del fraude amplio.
Ellos que tan rápido son para atragantarse con
palabras como democracia, independencia, etc. cuando se les cruza algo, más
rápido que ligero muestran su verdadero sentir al respecto.
“El diputado y
secretario general del Partido Socialista, Yerú Pardiñas, dijo a El País que si
bien se respeta la decisión adoptada por la Suprema Corte de Justicia (SCJ) en el
caso Mota, no se la puede tomar "como una verdad absoluta". En el FA
"hay preocupación con que las expresiones de la Suprema Corte estén
colidiendo con las definiciones parlamentarias", admitió Pardiñas. Y opinó
que "es evidente que de consagrarse todas estas resoluciones, la mayoría
de la Suprema Corte está interpretando las normas en forma bastante diferente a
lo que es el sentir no solamente del Frente Amplio, sino también en el caso de
la jueza Mota de las organizaciones sociales".”
Es evidente que este personaje de segunda o tercera
línea, no soporta que la SCJ tenga su opinión y la ejecute como corresponde, si
esa opinión va en contra de su frente amplio y o de las organizaciones
sociales, que es lo mismo.
Si lo hubiera pensado, no lo habría dicho así, tan
descaradamente, pero a veces, el subconsciente traiciona.
“En la misma línea, el senador y secretario general del Partido
Comunista, Eduardo Lorier, criticó desde su muro de Facebook las decisiones de
la SCJ, a las que vinculó al "poder hegemónico".
"Pienso que hay cosas que pueden verse aisladas unas de otras y no
está mal. Pero a veces conviene unir hechos que parecen no relacionarse a
primera vista. Entonces uno empieza a aproximarse un poco más a la realidad y,
con ello, a la verdad. Por ejemplo, estoy haciendo el ejercicio de unir
traslado de Mota con posible inconstitucionalidad de la ley interpretativa de
la Caducidad y con la anunciada inconstitucionalidad del ICIR. Y eso me va
llevando a ver cómo se mueve el poder hegemónico, cómo no se pueden tocar
algunas vacas sagradas".
Según Lorier, "las superestructuras jurídico-políticas actúan para
defender los intereses dominantes. La tierra no se toca y a los criminales
violadores de los Derechos Humanos tampoco. Eso nos quieren decir. Por eso, qué
bien que han hecho (Hugo) Chávez, (Rafael) Correa y Evo (Morales) modificando
la Constitución por la vía democrática".”
Lo dicho, un comunista
garganteando de democracia, es un sarcasmo. Y felicita a otros comunistas, que
han “sabido” modificar las constituciones, para que éstas dejen de ser
democráticas y se pongan al servicio de su partido. Y lo mejor de todo, lo
hicieron por la vía democrática.
Es decir, lograron el
objetivo de destruirla desde adentro, como el gusano que se come a la manzana,
la destruye sin saber que al final, se destruye a sí mismo.
Lonjazo